Esta herramienta de inteligencia artificial fue desarrollada por DeepMind, una división de Google centrada en IA, y aunque ya existía desde el año pasado como parte de un estudio científico, sólo ahora se ha convertido en un programa comercial. Se han tomado más tiempo en presentarlo para poder estar seguros de su seguridad y evitar los abusos y los fines maliciosos de esta tecnología, reduciendo así las polémicas que rodean a la creación de contenido generado por IA, especialmente en el sector creativo.